Cuando tocamos la cabeza del Campanello, el pequeno personaje que hemos creado, nos estamos involucrando en un pequeno espectaculo que se lleva a cabo justo en nuestra mesa. Nos encontramos cara a cara con una pequena y misteriosa criatura y nos vemos inmediatamente atraidos por el gusto de usarlo. Es como una especio de juguete para adultos, con cabeza ojos y una apariencia vivaz. El gesto de tocar la figurita y escuchar su sonido se convierte en un mini espectaculo que favorece el disfrute del momento.
-Alessandro Mendini-